Isabel Díaz Ayuso, presidenta de la Comunidad de Madrid, conmemoró el 28º aniversario del asesinato de Miguel Ángel Blanco por ETA, enfatizando la necesidad de recuperar el "espíritu de Ermua". Criticó a los cómplices de ETA que, según ella, deslegitiman al Estado de Derecho y abogó por que ningún partido incluya en sus listas a condenados por terrorismo. También instó a los jóvenes a conocer la historia para entender la gravedad de estos actos.
La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, participó en un emotivo homenaje a Miguel Ángel Blanco, conmemorando el 28º aniversario de su asesinato a manos de la banda terrorista ETA. Durante el acto, celebrado en la capital, Díaz Ayuso enfatizó que “ahora que los cómplices de ETA le roban la legitimación que no merecen al Estado de Derecho por siete votos, el espíritu de Ermua tiene que regresar”. La mandataria subrayó la importancia de no permitir que ningún partido político presente en sus listas a personas condenadas por terrorismo.
En su discurso, Ayuso también instó a los jóvenes a conocer la historia para comprender “la infamia de lo que están haciendo”. Recordó las 853 víctimas asesinadas, entre ellas muchos niños, y las más de 7.500 personas afectadas por el terrorismo. “Todos somos responsables de que se haga justicia y se cuente la verdad”, añadió durante el evento denominado Somos Memoria, organizado por la Fundación Miguel Ángel Blanco.
El homenaje tuvo lugar en los jardines dedicados al concejal asesinado, ubicados en la calle Federico Salmón del distrito de Chamartín. Este acto busca mantener viva la memoria de las víctimas del terrorismo y reafirmar el compromiso social con la justicia. La presidenta destacó que es fundamental recordar estos hechos para evitar que se repitan en el futuro y para honrar a aquellos que perdieron la vida injustamente.
Díaz Ayuso concluyó su intervención recordando que “en la Comunidad de Madrid no olvidamos” y reiteró su compromiso con las víctimas y sus familias, asegurando que seguirán luchando por un futuro donde prevalezca el respeto y la memoria histórica.